CNAC anunció presupuesto, costos promedio para producción de cine venezolano en 2016 y creación de comisiones especiales
Juan Carlos Lossada, presidente de la institución, informó la instalación de la Mesa Técnica de Producción, Comisión de Investigación y Formación Cinematográfica, Comisión de Patrimonio Audiovisual y Mesa Técnica de Distribución y Exhibición.
El Centro Nacional Autónomo de Cinematografía (CNAC), en aras de dar continuidad al desarrollo de nuestro séptimo arte y combatir la complejidad de la situación económica que atraviesa actualmente el país, ha determinado el monto de los costos promedio de producción del cine venezolano para 2016, la creación de cuatro comisiones especiales destinadas a atender las crecientes necesidades de las distintas áreas de la cinematografía venezolana y dio cuenta de la gestión presupuestaria para el año en curso.
En conjunto con el Foro del Cine Venezolano -coordinado por Iván Zambrano- y los gremios de la comunidad audiovisual que lo conforman, la institución ha fijado que el costo promedio en marzo de 2016 para un Largometraje de ficción es de bolívares 37.368.936,11; Cortometraje de ficción 2.155.763,88; Largometraje de documental 16.576.091,44; Mediometraje de documental 8.288.045,72 y Cortometraje de documental 1.841.787,94. Estos montos fueron evaluados y determinados por una comisión de peritos, aprobados por el Comité Ejecutivo.
Así lo anunció Juan Carlos Lossada, presidente del CNAC, en un encuentro con cineastas, productores, técnicos y gremios realizado en el Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (Celarg), en Caracas. “Los criterios que se pusieron en práctica para determinar los nuevos costos son los mismos que se aplicaron el año pasado, y se le agregó flexibilidad para entender que las reglas de juego que hemos venido aplicando para la producción cinematográfica tienen que cambiar en la misma medida que ha cambiado el país y sus condiciones económicas. Estamos plenamente conscientes de la necesidad de flexibilizar y hacer menos rígidas determinadas regulaciones, para estar más a tono con una necesidad de adelantarse a los efectos de la inflación y poder conseguir que haya una concertación de acuerdos mucho más temprana entre todas las compañías productoras”.
Reiteró el compromiso de realizar, aproximadamente en septiembre próximo o antes, una segunda revisión a los costos promedio y ajustarlos hacia arriba. El conjunto de comisiones creadas está conformado por la Mesa Técnica de Producción, destinada a la articulación de un debate que genere insumos para la segunda actualización de costos este año.
También se creó la Comisión de Patrimonio Audiovisual, con base en la competencia que da la Ley de la Cinematografía Nacional para generar políticas en materia de conservación y preservación fílmica, en acuerdo con los demás organismos nacionales, estadales y municipales del país, públicos y privados. Junto con la Biblioteca Nacional y la Cinemateca Nacional, se buscará dar los primeros pasos para atender los problemas acumulados en materia de archivo fílmico y patrimonio audiovisual del país. “No podemos seguir construyendo una producción de cine si esa producción no está casada con una política estructural, permanente, seria y responsable en el tiempo que garantice su preservación”.
La Comisión de Investigación y Formación Cinematográfica estará llamada a abonar el camino de soporte a la atención del conocimiento en materias tan disímiles como las nuevas tecnologías, la memoria histórica, la preparación de recursos humanos en los ámbitos técnicos y artísticos para el cine nacional, entre otros; mientras que la Mesa Técnica de Distribución y Exhibición, que existe desde hace más de un año y que ahora se constituye en Comisión asesora y proponente de iniciativas, tendrá a su cargo la formulación de mecanismos que procuren mejorar y ampliar la presencia del cine venezolano en las pantallas de cine y demás medios existentes y superar los escollos e inconvenientes que debe enfrentar.
El presupuesto del CNAC en el año 2016 es de 574.071.665,oo y en las próximas semanas se realizará la primera de dos reformulaciones previstas para el presente ejercicio fiscal, que permitirán inyectar en un primer momento 258.481.060,oo, provenientes de recursos saldo de caja del año 2015 y de excedentes de recaudación de Fonprocine.
Una vez aprobada, esta reformulación permitirá que el CNAC disponga de bolívares 832.552.725,00, de los cuales 451.131.317,00 serán destinados a la producción cinematográfica. Actualmente se cuenta con 299.331.317,00, que representa el 60% del presupuesto no reformulado.
“¿Qué se puede hacer con eso? Financiar los cinco largos de ficción y el largo de documental que recién fueron seleccionados. También hay resultados en otras modalidades de otros proyectos que tienen un aporte más pequeño. De hecho, ya se ha ejecutado parte de ese dinero, porque no es solo para financiar estos proyectos, sino para ajustar los tres largometrajes que fueron seleccionados el año pasado, dos de los cuales están finalizando rodaje actualmente: ‘Muerte en Berruecos’ y ‘Bárbara’. Otro iniciará rodaje a finales de este mes, ‘El vampiro del Lago”, comentó Lossada.
Del referido presupuesto también se han destinado recursos para hacer ajustes presupuestarios y otorgar aportes adicionales a proyectos cinematográficos financiados en años anteriores y otros evaluados en lo que va del 2016 por el Comité Ejecutivo, constituido como Comisión de Estudio de Proyectos. Los fondos que el CNAC invierte en producción se dividen en dos tipos presupuestarios: un dinero que va a subsidio, compuesto por más del 60% de todas las inversiones y otro que va a participación financiera, que permite al CNAC asociarse con cada película, con cuyos rendimientos económicos se conforma un fondo retornable destinado a la misma producción cinematográfica en el país para apoyar nuevos proyectos.
Además de los 6 nuevos largometrajes y de un nuevo proyecto de desarrollo de largometraje de animación recomendados por la Comisión de Estudios de Proyectos en el último corte de evaluación de 2015 y que el Comité Ejecutivo acaba de declarar elegibles, se analizaron 22 proyectos de desarrollo de guión, de los cuales han sido seleccionados cuatro, que recibirán cada uno un aporte de 170 mil bolívares.
Los nuevos costos promedio que acaban de ser aprobados, se aplicarán entonces inmediatamente a ocho largometrajes de ficción, los tres que iniciaron preproducción a fines del 2015 e inicios de 2016 y los cinco nuevos proyectos que acaban de ser declarados elegibles por el CNAC para recibir fondos de producción en los próximos meses. Que nuestro cine esté dispuesto a hacer y tenga las capacidades para hacer 8 películas de ficción en este momento complejo, expresa muy bien la calidad, voluntad, compromiso y experticia de nuestra comunidad cinematográfica nacional.
Ello en suma a los apoyos aprobados a otros filmes en otras modalidades como la coproducción con Argentina del largometraje “Arpón”, el corto “Salta”, la postproducción de los largometrajes “El arte de la fuga”, “Abril” y “Azul como el cielo” y del cortometraje “Tenemos que hablar”. Una vez lograda la primera reformulación presupuestaria, el CNAC procederá a efectuar el I Corte de Evaluación de Proyectos del 2016, que se estima hacer antes o en torno al 15 de mayo.
Asimismo, el CNAC proyecta realizar una segunda reformulación de su presupuesto del año 2016 en la segunda parte del tercer trimestre de este año, con base en las recaudaciones excedentarias que espera obtener de Fonprocine a partir del mes de julio, con cuyos recursos podrá financiarse un segundo corte de evaluación de proyectos en el presente ejercicio fiscal.
Lossada informó que en el transcurso de este mes, abrirán la convocatoria de Cultura Cinematográfica, que admitirá proyectos en las áreas de divulgación, formación, investigación y publicación de las obras. De igual forma, se hará la convocatoria para el “Estímulo a la Base Industrial”.
“Ha llegado el momento de aprovechar estas circunstancias lo mismo difíciles que retadoras, que imponen revisión y relanzamiento de nuestro cine, para debatir con franqueza y honestidad cuáles son los rangos que harán respetar las experticias que tiene la gente aquí. No es normal que una persona, sin haber tenido experiencia previa o casi ninguna en un oficio como el cine, bien sea en fotografía, sonido o cualquier otra área, sea remunerado de igual forma o hasta más que una persona que ha fotografiado 50 películas en su carrera y llenado de luz nuestro séptimo arte. Ese debate hay que darlo y no se trata de bajarle los costos a quienes van entrando, sino encontrar un equilibrio que establezca proporciones aceptables para todos. Propongo que el espacio para ello sea el Foro del Cine Venezolano y particularmente la Mesa Técnica de Producción. De allí deben surgir los insumos, los nuevos insumos para fijar en la segunda parte del año, los nuevos costos promedio de producción que habrán de ser acordados a partir del debate plural y el acuerdo colectivo”.
El presidente del CNAC instó a la unión entre los realizadores para elevar la calidad de la cinematografía venezolana. “Mi invitación es a que esa construcción sea menos institucional e individual y sea más de orden colectivo. Hagan suya la reivindicación de la Segunda Reforma a la Ley de Cine, pues está diseñada en función de fortalecer nuestras obras y patrimonio cultural y audiovisual. Debemos acercarnos a las prácticas que nos hacen bien y encontrar inspiración en el buen hacer venezolano. Hay gente que sigue haciendo cine de manera porfiada y sostenida en el país, gente que cree en Venezuela y en su cine. En este mismo momento, por ejemplo, Román Chalbaud, a sus 85 años está dictando unos talleres en el CNAC. Luego se va a Cumaná a entregar unos certificados de otros que dictó hace unos meses. Margot Benacerraf, quien nos honra con su presencia, inauguró el martes, a sus casi 90 años, un nuevo espacio para la apreciación del cine mediante encuentros o foros en la Universidad Central de Venezuela con estudiantes en torno a grandes maestros de nuestro cine, quienes siguen en pie construyendo nuestro imaginario nacional. Si ellos hacen lo que hacen todos los días, y viven como el primer momento, obsesionados por seguir haciendo cine, aquí nadie tiene derecho, ni ustedes ni yo, a establecer una fórmula diferente. Todo el mayor esfuerzo para seguir construyendo nuestra cinematografía nacional”.
Texto y fotos: Ernest Stuyvesant